CENJU

Cuando se realiza una búsqueda de noticias sobre la Comuna Ciudadela del Norte en los medios de comunicación de Manizales, las rotundas palabras de los titulares sentencian a la marginalidad social a quienes habitan el sector: "12 motos para la seguridad en San Sebastián", "Allanaron 24 viviendas en Ciudadela del Norte", "En barrios de la Ciudadela del Norte, las niñas llevan drogas", "En Ciudadela del Norte, en Manizales, suplicaron por seguridad", son algunos de los titulares que describen el panorama de esta comuna.

Fotografía: Colegio San Juan Bautista de la Salle ubicado en la Comuna Ciudadela del Norte

El discurso periodístico denuncia la drogadicción, la prostitución, el tráfico de estupefacientes y la delincuencia como los lastres que a cuestas llevan los habitantes de la Ciudadela y los riesgosos vacíos ante los cuales se ven interpelados día a día los jóvenes que allí crecen.
Las fuerzas estatales y el aumento de dispositivos de seguridad constituyen la aparente solución a los problemas sociales que atraviesan la historia de la comuna, una ruta que sugiere mejorías inmediatas pero que no garantiza cambios estructurales en sus residentes.

Construyendo lugares de la paz
El Centro Comunitario para la Reconciliación y la Paz, un espacio del Centro de Estudios Avanzados en Niñez y Juventud trabaja desde hace años con la Comuna Ciudadela del Norte, y cuenta con diplomados dirigidos a líderes comunitarios, así como planes de formación en memoria histórica y apropiación del territorio, sabiendo que la educación es aquella certeza de transformación social para los niños, niñas y jóvenes cuya existencia acontece en condiciones de vulnerabilidad. Por esto se ha creado el programa Servicio Social para la Paz como un proyecto abanderado de este año por parte del Programa Niños, Niñas y Jóvenes constructores de Paz del Centro de Estudios Avanzados en Niñez y Juventud.
Servicio Social para la Paz es un programa cuyo horizonte de sentido es resignificar la labor del servicio social obligatorio al interior de los colegios para que los jóvenes desarrollen sus potencialidades y contribuyan a la construcción de paz y convivencia. Esto, teniendo en cuenta el déficit de programas de formación que le permitan al estudiante generar un verdadero aporte a la institución y la comunidad.

Fotografía: Presentación del Servicio Social para la Paz a los estudiantes de últimos años de colegio.

El proyecto está siendo implementado en la Comuna Ciudadela del Norte y está organizado en tres grupos: el primero está en el colegio Bosques del Norte, el cual cubre los barrios San Sebastián, Santa Ana, Bosques del Norte, y Bengala. El segundo está en la Institución Educativa Sinaí, que cubre parte del barrio Solferino, Samaria, Porvenir y Comuneros. El tercer grupo vincula los colegios San Juan Bautista de la Salle y el colegio La Asunción, y abarca los barrios Villa Hermosa, San Cayetano y Peralonso.
El despliegue del programa se dará en campos como el deporte, la música, la danza y la fotografía, entre otros, contando con organizaciones aliadas como Juventud Rebelde, Marcha Patriótica, Defensoría del Pueblo y la Fundación Comunitaria Huellas de vida.
Ante la pregunta por el potencial de formar jóvenes que presten servicio social para la Paz en este momento coyuntural e histórico que atraviesa Colombia, Julián Loaiza De La Pava, coordinador del Programa Niños, Niñas y Jóvenes Constructores de Paz afirma:
"Se ha puesto a discutir a todo el mundo sobre la necesidad y la urgencia de construir procesos de paz de distintas maneras. No significa que el país no lo hubiera hecho antes, solo que el impulso, la fuerza la motivación, todo eso que se convierte hoy en una suerte de esperanza de poder vivir mejor, le ha permitido a la gente tomar posición y consciencia de la necesidad de construir de una manera más decidida mejores condiciones de vida para los niños, niñas y jóvenes de Colombia. En este sentido lo que pretendemos con el proyecto es que esa consciencia ancle en los chicos que están en los últimos grados del colegio, porque la Paz no es un asunto solo de los adultos, tampoco es solo un asunto de políticos, sino que los procesos de Construcción de Paz nos implican a todos".

Fotografía: Julián Loaiza, coordinador del Programa Niños, Niñas y Jóvenes Constructores de Paz, quienes lideran el proyecto de Servicio Social para la Paz.

El Servicio Social para la paz significa hacerse cargo de los procesos sociales y comunitarios, los procesos de hacernos comunes con los otros en favor de ese despliegue de estrategias que nos permitirán seguir viviendo pero no de cualquier manera, sino vivir en potencia, potenciando la forma de estar juntos.

Antonia Montoya Castaño
Comunicaciones / Centro de Estudios Avanzandos en Niñez y Juventud
del Cinde y la Universidad de Manizales